La leche materna varía según el paso de los días y semanas.
Los primeros días el lactante tomará una leche de apariencia amarillenta y espesa de fácil digestión llamada calostro, alimento perfecto para el bebé. Rico en proteínas y anticuerpos. Además, este ayuda al recién nacido a evacuar las primeras heces conocidas como meconio. Es importante recalcar que el calostro supone muy poca cantidad (20-40 ml) pero es lo que el bebé va a necesitar tras nacer.
A partir del día 3 hasta el día 14, el calostro dará paso a la leche de transición, que es más fluida, con menos proteínas pero más azúcar, grasas, vitaminas hidrosolubles, etc. Este período corresponde a lo que es conocido como "la subida de la leche".
Al cabo de unas dos semanas, la leche se conoce como "madura"; de color un poco blanquecino y ligeramente translúcido. Esta leche madura varía su composición a lo largo del día y durante la toma ajustándose al momento específico en que se encuentra el bebé. Los componentes de este tipo de leche esenciales para el crecimiento del bebé son: agua, proteínas, h. de carbono (90% lactosa), grasas (ácidos grasos esenciales), sales minerales (calcio, hierro, fósforo) y vitaminas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario